Hay Manzanares más allá de Madrid Río

Un ratonero observa cómo dos milanos reales pugnan en vuelo por una presa que sostiene uno de ellos. Tras acrobacias varias se les cae la presa (pinta de paloma) y el ratonero aprovecha la ocasión para hacerse con ella, emprender un vuelo raudo de huida y dar buena cuenta de la pieza en un pino. Pero tampoco hay paz para el ratonero, tres urracas le atosigan con el ánimo de compartir/hurtar la comida. Y a todo esto, imperturbable, una garza real presencia la jugada posada sobre un sauce. No, no se trata de una escena de un documental de naturaleza, es una vivencia directa en un tramo periurbano del río Manzanares.

En Aver Aves nos dimos un paseo recientemente por zonas verdes insertas o aledañas al madrileño barrio de Villaverde Bajo para localizar los mejores lugares a visitar con colegios de la zona que ya han mostrado interés en descubrir juntos la biodiversidad que les rodea. Tras recorrer parques y jardines donde mirlos, petirrojos y mosquiteros no dejan de llamar la atención con cantos, poses y vuelos variados, dimos con nuestros pies a la orilla del río Manzanares.

Es palpable que en la actualidad Madrid Río vive un boom de difusión y visitas. No es para menos. Tanto en recorridos con escolares, como por nuestra cuenta, constatamos que es uno de los “puntos calientes” para el esparcimiento en general y para la observación de la avifauna en particular en la ciudad de Madrid. Pero se corre el riesgo de acotar el disfrute urbano del río Manzanares a este parque y no ir más allá. Hacia su desembocadura en el Jarama, el Parque Lineal del Manzanares primero y el restante tramo urbano que llega hasta el distrito de Villaverde después, el cauce no deja de sorprender.

La acción de tres rapaces en vuelo, las “tocanarices” de las urracas y la parsimonia zen de la garza real son ejemplos de la vivacidad que rodea al río madrileño por antonomasia. Arropado por sauces, alisos, fresnos, tarays y álamos, el río discurre lento y con tan leve alteración en su curso que las voces y cantos de más mosquiteros, además de ruiseñores bastardos, fochas, gallinetas y lavanderas se adueñan de la banda sonora del paisaje.

Recorrer continuamente la biodiversidad urbana presente en Madrid nos lleva a veces a repetirnos con expresiones como esta: hay tramos del río Manzanares que parecen sacados de parajes auténticamente silvestres. Sales de este ensimismamiento cuando miras a derecha, izquierda o arriba y ves edificios, vallas publicitarias, carreteras y tendidos eléctricos. Pero esa es también la grandeza de esa biodiversidad de las ciudades que intentamos inculcar a los escolares: el contraste y convivencia entre “lo verde y lo gris”.

En cualquier caso, no desvelamos más sorpresas del recorrido que hemos diseñado para los peques de coles de Villaverde Bajo. Queremos que sean ellos y ellas, en vivo y en directo, los que admiren, valoren y respeten el tesoro natural que tienen al lado de sus centros escolares. Y todo en pleno frío otoñal. Sí, aquí también nos repetimos: no caigáis en el craso error de postergar una salida con escolares para disfrutar de esta vivaz biodiversidad por temor a las bajas temperaturas o a las «cuatro gotas». Ahora también las aves quieren que admiremos sus andanzas. Apúntate.

Infórmate sobre nuestras rutas para colegios, institutos y AMPAs por parques y jardines de la Comunidad de Madrid.

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