Ochenta especies de aves en los últimos treinta días. Y no es lo mejor

En el tiempo que ha transcurrido desde la última entrada al blog hemos identificado 79 especies diferentes de aves entre los recorridos con Aver Aves y las escapadas a Ávila y Salamanca en Semana Santa. Pero, más allá de la cantidad, volvió a sorprender la calidad, como ver al mochuelo europeo en el parque Emperatriz María de Austria en Carabanchel, a la cogujada común en el interior del Colegio Aquila de Parla o a una pareja de tarros canelos en el parque del Olivo de Coslada. Una ruta entre zonas esteparias madrileñas y otra por Carabanchel permitieron ver a dos aves de récord: avutarda euroasiática y halcón peregrino.

Justo al día siguiente de subir la última entrada al blog, el 29 de marzo, emprendimos una de nuestras rutas a la carta para quienes nos piden un pajareo más “salvaje” tras probar las mieles de las aves en la ciudad. La elección fueron las estepas cerealistas de los ríos Jarama y Henares y el momento la rueda en celo de las avutardas euroasiáticas.

Las avutardas acudieron a la cita en tiempo y forma, contemplando así a 40 kilómetros de la Puerta del Sol al ave más pesada del mundo que puede volar. Además, para corroborar esto último vimos algunos bandos en vuelo. Como en vuelo vimos una migración de medio centenar de cigüeñas blancas y rapaces de postín, como águila imperial ibérica, buitre negro y águila calzada.

Dos días después, en Pinto, nos estrenábamos con un centro escolar, el IES Vicente Aleixandre, que tiene a sus puertas un nido de cigüeña blanca. Lo mismo que ocurre (nidificación de resta zancuda al lado) con el Colegio Aquila de Parla, con el que estrenamos el mes de abril. Con este último volvió a llamar la atención un clásico: cogujadas comunes en el interior del centro escolar. Hasta la fecha, es el único centro en el que las cogujadas aparezcan tan confiadas.

El 5 de abril vivimos un momento muy especial, ya que con 36 especies identificadas, la HistoriAves por Carabanchel que realizamos entre el parque Emperatriz María de Austria (o Parque Sur) y la plaza de Oporto se convirtió en récord de esta modalidad. Un mochuelo europeo, la llegada de los primeros abejarucos y zampullines comunes constituyó lo más llamativo del paseo por el lado ornitológico.

Al día siguiente, 6 de abril, tocó visita con otra HistoriAves carabanchelera al animal más veloz del mundo, el halcón peregrino, que anda siempre sobrevolando parques limítrofes de los distritos de Carabanchel y Latina. Y antes del parón de Semana Santa, el alumnado de 3ºB del CEIP Gonzalo de Berceo no salió del asombro de ver, a cincuenta metros del cole, en el parque del Olivo, tarros canelos, paloma zurita, petirrojo europeo y curruca cabecinegra.

Ya fuera de las actividades de Aver Aves, nuestro periplo vacacional nos llevó hasta el Alto Alberche en Ávila y la sierra de Béjar en Salamanca. Tuvimos oportunidad de escuchar a los primeros cucos y ver a las primeras golondrinas dáuricas, aparte de disfrutar con la observación de lavanderas boyeras, aviones zapadores y mosquiteros papialbos y la escucha de zorzales charlos y comunes, chochines paleárticos y alondras comunes.

De vuelta a las rutas de Aver Aves, mucho Madrid Río con los IES Gran Capitán y El Espinillo y una de las HistoriAves que sacamos fuera de Carabanchel, la que une este parque que vertebra el río Manzanares con el más grande de la capital: la Casa de Campo. Ruiseñor común, garza real, focha común, grajilla occidental, papamoscas cerrojillo y avión roquero dominaron algunas de estas rutas, sin olvidar destacar dónde nació Madrid y quién fue su fundador.

Pero como nos gusta siempre quedarnos con las aves con las que partimos para comenzar a enamorarnos de ellas, acabamos en el CEIP Gabriel y Galán y el parque Arroyo de la Vega de Alcobendas. Primera vez también que abríamos aulas en los parques con este centro. Para que pudieran ir dos grupos (tercero y cuarto de primaria) el mismo día hubo que dividir la sesión y acortar cada ruta, pero esto no rebajó ni un ápice la emoción.

“A esta ruta le doy un diez porque nunca pensé que había tantas especies enfrente de mi cole”. Y nosotras tan contentas. Pero sobre todo, para contentas las vecinas que descubrieron por primera vez: serín verdecillo, jilguero europeo, carbonero común, vencejo común, gorrión molinero y vencejo común. Aparte de pararse a disfrutar por primera vez, con tranquilidad y prismáticos, de urracas, mirlos, torcaces, cotorras, golondrinas y hasta gorriones comunes. Muy comunes, pero, como siempre, poco contempladas y apreciadas. Hasta que llegó Aver Aves.

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