No es la primera vez que hablamos en este blog sobre el efecto saludable para las personas que tienen los parques y jardines que nos rodean, por muy pequeños que sean. Cierto, la salud se multiplica si nos sumergimos en espacios naturales más alejados de las urbes, pero no hay que desdeñar los primeros como fuente de bienestar. Se hablará de ello en la jornada Naturaleza y salud: evidencia, bienestar y ciudades habitables, que tendrá lugar en Santander el próximo 8 de octubre, y lo constató la última Termometrada, con nuevas evidencias sobre la gran diferencia de calor entre zonas con árboles y otras cercanas desarboladas. Y lo pondremos en práctica ya mismo en Aver Aves, llevando a escolares y personas adultas a recorrer once parques de la Comunidad de Madrid.